Iglesia de los jesuitas

La iglesia de los jesuitas define a su manera el casco antiguo de Heidelberg, ya que el elegante aspecto del edificio lo convierte en una belleza única. Sin embargo, la mayor iglesia católica de Heidelberg también tiene una historia accidentada. Durante casi una generación estuvo a medio terminar e incluso se utilizó como hospital militar, y pasaron más de cien años antes de que se terminara la torre de la iglesia. Tras una completa renovación, la iglesia de los jesuitas celebró en 2009 su finalización, hace 250 años, y al mismo tiempo su consagración como iglesia parroquial católica, hace 200 años.

Construcción y finalización

Tras el final de la Guerra de Sucesión del Palatinado, toda Heidelberg quedó en ruinas. El elector Johan Wilhelm observó una afluencia de creyentes a los calvinistas, por lo que se enviaron jesuitas a la ciudad del Neckar. Estos debían conducir a todos de vuelta a la fe correcta y negar a la entonces reformada Heiliggeistkirche su rango. En 1705, se construyó el Colegio de los Jesuitas con las piedras de la Torre de los Gruesos del castillo. Se iba a construir una nueva iglesia justo al lado del colegio, por lo que la primera piedra de la iglesia de los jesuitas se colocó el domingo de Pascua de 1712.

El albañil Johann Adam Breunig llevó a Düsseldorf un diseño del Palacio de Schwetzingen. Como recompensa, el elector Johann Wilhelm le encargó la construcción de la iglesia. Breunig diseñó una iglesia de salón con tres naves y contrafuertes curvos, tomando como modelo la iglesia jesuita Il Gesu de Roma. Cuando la iglesia de Heidelberg estaba sólo a medio terminar, el Elector murió. Desde entonces, la parte cubierta de la iglesia de los jesuitas de Heidelberg sirvió de edificio improvisado.

En 1749, el príncipe elector Carl Theodor continuó la construcción hasta que se terminó en 1759. Tras la disolución de la orden jesuita en 1777, el edificio se convirtió en un hospital militar en 1793. Hasta el 1 de noviembre de 1809 no se consagró como única parroquia católica de Heidelberg. No fue hasta 1872 cuando el edificio recibió su campanario.

Edificio barroco

Hoy en día, el interior impresiona por su abundancia de luz creada por los grandes ventanales. El mobiliario barroco ya no existe. La fachada frontal, ricamente decorada, tiene un efecto mediterráneo, con la estatua de Jesús en el centro. El elector Federico el Victorioso fue enterrado en una cripta. La entrada al antiguo colegio de los jesuitas está al este de los portales de la iglesia. Las antiguas instalaciones de los jesuitas son ahora utilizadas por la administración de la universidad.

En general, el edificio carece de adornos. Sin embargo, la incidencia de la luz crea un efecto especial en el interior de la iglesia orientada al sur.

Hoy en día, la iglesia alberga el Museo de Arte Sacro y Liturgia, donde los visitantes pueden ver arte de los siglos XVII a XIX. La exposición, que incluye una Virgen de plata de 1735, es una documentación del trabajo de los jesuitas del entonces Palatinado Electoral.