La monarquía hereditaria parlamentaria de España ocupa la mayor parte de la Península Ibérica y, además de la península, también incluye las islas Baleares y Canarias. El país es tradicionalmente uno de los destinos vacacionales más populares de Europa, gracias en parte a sus magníficas playas de arena. La capital, Madrid, es rica en monumentos: El Palacio Real y el estadio de fútbol Santiago Bernabéu, con capacidad para más de 80.000 espectadores, son sólo dos ejemplos. No menos atractiva es Barcelona, con su legendaria Sagrada Familia. Sevilla, Valencia y Málaga también destacan por su enorme diversidad cultural.