Apenas hay otro país en el mundo que haya concedido a uno de sus luchadores por la independencia el honor de bautizar la nación en su memoria. Este es el caso de Bolivia, y este nombre se remonta a Simón Bolívar. Fue el primer presidente de la nación andina y es venerado como héroe nacional no sólo en Bolivia. Hijo de una familia criolla, nació en Caracas (Venezuela), viajó muy joven por Europa y allí conoció el triunfo y la tragedia de Napoleón Bonaparte, su ascenso a emperador, y se fue animando con la voluntad de liberar a los pueblos y países sometidos de Sudamérica del azote de los ocupantes europeos. Se sintió llamado a participar en la lucha de liberación, pasó algún tiempo en el exilio y, tras la conquista de Angostura en 1821, se convirtió en el primer presidente de la Gran Colombia. La denominación de Bolivia es una reverencia posterior a la gesta de este luchador por la libertad.
